“Cualquier cliente puede tener el coche del color que quiera, siempre y cuando sea negro”.
Estas palabras acostumbraba a decir Henry Ford allá por la primera mitad del siglo XX refiriéndose al modelo Ford T en la primera mitad del siglo XX que sin duda hoy estarían bastante desactualizadas.
¿Se imaginan a una fábrica de sillones dentales ofreciéndoles a los odontólogos solamente aquellos tapizados de color azul? La verdad es que es imposible.
Según se afirma, Ford optó por el color negro porque la pintura seca más rápido que otras pinturas de colores disponibles en el momento, y le permitiría construir más coches, ya que no habría que esperar a que la pintura se seque.
A pesar de ese motivo, se utilizaron más de 30 tipos diferentes de pintura negra para pintar diversas partes del Modelo T, debido a su aplicación y distintos tipo de secado.
Sea cual fuere el motivo, esta decisión no se tomo sin pensar.
Cuando Ford fabricó su unidad número 10 millones, 9 de cada 10 coches que circulaban en el mundo eran Ford T.
Hoy, en un escenario complejo las clínicas se disputan a los pacientes que a su vez son más exigentes y cuentan con la información necesaria para cada tipo de producto y servicio, pero al observar las publicidades dentales, pareciera que todas ofrecieran lo mismo. Todo el mundo ofrece blanqueamiento, ortodoncia e implantes con explicaciones y fotos de modelos de bancos de imágenes todas similares bajadas de la web. Puede ser ese orden o en otro, en mayúsculas o minúsculas, en revistas, folletos, o fan page, más caro o más barato. ¿Pensás que el paciente al ver y leer eso, siente alguna diferencia?
Tengamos presente que el paciente que mira estas publicidades siente que le están por vender un coche de color negro, con la excepción que el mercado de hoy no ofrece solo una marca como Ford (“llámese consultorio”), sino que hay cientos o miles de acuerdo a dónde estés trabajando. Entonces ¿cómo podes diferenciarte en un mercado cuando hay centenares con tu misma profesión?
Desde luego que no hay una sola forma de llevar adelante una profesión y sobre todo no hay reglas (siempre dentro de todo lo ético y legal) que no te permitan un poquito más de creatividad para diferenciarte de la competencia.
En otros artículos iré describiendo algunas de las estrategias de diferenciación, basadas en la especialización, la creatividad y el nuevo marketing dirigido a tu potencial paciente del consultorio.
El éxito o fracaso de nuestra oferta dependerá de ellos, que elegirán entre las muchas opciones disponibles, porque una diferenciación solo es exitosa si es reconocida por los pacientes, es decir, si hemos logrado construir el posicionamiento de nuestro consultorio.
Entonces, es tiempo que te preguntes ¿cómo diferenciarás tus servicios?
Por el Dr. Cristian Kulzer